MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
El portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price, ha condenado los recientes ataques de los rebeldes huthis contra Arabia Saudí, unas acciones que ha calificado como “una clara provocación destinada a perpetuar el conflicto”.
Los huthis han confirmado distintos ataques a Arabía Saudí el jueves –para los que emplearon 18 drones y ocho misiles balísticos–, entre los que se provocó el incendio de una instalación petrolera en la ciudad Jizán, en el suroeste del país.
“Este es el último de una serie de intentos huthis de interrumpir el suministro energético mundial y amenazar a la población civil”, ha aseverado este viernes Price, para lamentar que los ataques se han producido días después de que Arabia Saudí y Yemen anunciaran su compromiso de alcanzar un alto el fuego y entablar conversaciones de paz dirigidas por la ONU.
En este sentido, ha criticado que las acciones de los huthis “están prolongando el sufrimiento del pueblo yemení” y “poniendo en peligro los esfuerzos de paz” en un momento crítico en el que la comunidad internacional “está cada vez más unida detrás de un alto el fuego y una resolución del conflicto”.
“Nuevamente hacemos un llamado a todas las partes para que se comprometan seriamente y mantengan estrictamente un alto el fuego y participen en negociaciones bajo los auspicios de la ONU, en conjunto con el enviado especial de la ONU, Martin Griffiths, y el enviado especial de Estados Unidos, Tim Lenderking”, ha apelado el portavoz del Departamento de Estado.
La coalición militar encabezada por Arabia Saudí aseguró el jueves haber interceptado varios drones cargados con explosivos y lanzados por los rebeldes huthis desde el norte de Yemen, entre cuyos objetivos estaba una instalación petrolera de Jizán, la ciudad de Jamis Mushait y Najrán, además de otros lugares “con civiles y zonas residenciales”.
Asimismo, condenó que los huthis, respaldados por Irán, habían intentado atacar universidades en Jizán y Najrán, así como habían lanzado un misil balístico que impactó en Al Jauf tras ser lanzado desde la capital yemení, Saná, según informaron medios saudíes.
Los huthis confirmado después los ataques, señalando que habían sido ejecutados con motivo del sexto aniversario del inicio del conflicto en Yemen, que ha derivado en la mayor crisis humanitaria del mundo.
Estos nuevos ataques se han producido después de que Arabía Saudí haya propuesto a los rebeldes un alto el fuego en Yemen, una opción rechazada por los rebeldes y apoyada por la comunidad internacional.
La guerra en Yemen enfrenta al Gobierno reconocido internacionalmente, encabezado por Abdo Rabbu Mansur Hadi y apoyado por una coalición internacional liderada por Arabia Saudí, y a los huthis, respaldados por Irán. Los rebeldes controlan la capital, Saná, y otras zonas del norte y el oeste del país.
El conflicto ha sufrido un recrudecimiento en varios frentes durante los últimos meses, pese a los esfuerzos internacionales de mediación.
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